Bellerín: "Ese sabor de boca agridulce son unas buenas ascuas de las que hacer fuego otra vez"

Feliz por volver a la Europa League y dejar atrás una temporadas "de las más duras" que recuerda en lo personal, aunque cree que quedarse tan cerca de la Champions debe motivarles para superarse

Bellerín: "Ese sabor de boca agridulce son unas buenas ascuas de las que hacer fuego otra vez"
Un nuevo reseteo para el badalonés, en la imagen en Almancil junto a Rudy Kohon. - RBB

"Muy ilusionado", aunque también "cansado de tute de estos días". Así está Héctor Bellerín, que atendía este jueves a los medios oficiales del Real Betis para analizar un 'stage' en Almancil (Portugal) que va tocando a su fin: "Está siendo bonito. Veo al equipo con muchísimas ganas y muy enchufado. Las pretemporadas tratan de eso; aquí los jugadores agradecemos mucho el tipo de preparación que tenemos con el míster, porque es de mucho balón y muy intensa. Hay también muchos momentos y sesiones de gimnasio y de fuerza, de levantar pesas, Y de correr mucho también, pero es verdad que disfrutamos bastante de la pelota, que es lo que nos gusta. Confiamos todos en que con el balón en los pies también se pueda alcanzar el ritmo que necesitamos para llegar al primer partido. Tenemos, además, siete amistosos, creo en total. Estamos en la primera etapa de esta carrera de fondo, pero al equipo ha llegado muy bien preparado cada uno de sus vacaciones; hay ganas de superar el gran nivel con el que acabamos la temporada pasada".

Particularmente, no fue un broche deseado, pues, después de varios meses lesionado y sin dar con la tecla, se rompió durante la prórroga de las semifinales de la Conference League en Florencia ante la Fiorentina y aún no está del todo fino: "Ahora yo estoy también en la última fase ya de la lesión, ya prácticamente entrenándome con el equipo al 100%. Falta ultimar los últimos detalles, pero nada, muy contento. Ha sido un verano interesante al pasarlo en Sevilla a casi 50 grados y tener pocas vacaciones, pero yo me siento la verdad que muy afortunado, porque para mí Sevilla ya es mi ciudad. No siento esa necesidad que siente mucha gente de tener que desconectar y salir de vacaciones. Yo soy muy feliz haciendo lo que hago. He tenido mis días también para irme a la playa, tomar el sol un poquito y eso, pero, sobre todo, concentrarme en recuperarme al 100%, en llegar lo antes posible a poder entrenarme a tope con los compañeros. Eso es cuestión ya de días, no de semanas, así que la verdad que estoy muy contento con el progreso de la lesión".

En este punto, el badalonés quiere "agradecer a los fisios 100%; a los médicos y a toda la gente que se ha quedado conmigo y con Diego Llorente parte de sus vacaciones a ayudarnos a recuperar y que nos ayudan durante todo el año; para nosotros son unos ángeles de la guarda. Para mí, por lo menos, esta temporada pasada, que quizá en cuanto a lesiones y futbolísticamente ha sido una de las más duras que recuerdo como profesional, para mí han sido mi ayuda, mis pilares, la gente que me ha empujado a no caerme, ¿sabes? Porque, bueno, como tú dices, son momentos muy difíciles no sólo a nivel físico, que un isquio es difícil de recuperar (mi sesamoiditis fue todavía más complicada), pero también a nivel mental son una ayuda súper importante. Entonces, les estoy eternamente agradecidos, sí. Emocionalmente, fue uno de los momentos más intensos de mi vida. Acabábamos de hacer historia con este equipo, con esta plantilla, la primera vez que el Betis se va a jugar una final europea y yo venía de haber estado esperando obtener minutos después de cuatro o cinco meses lesionado y, de repente, en ese sprint sentir ese pinchazo fue como desgarrador".

Y ahondaba Bellerín en ese instante aún sobre el césped del Artemio Franchi: "Fue una experiencia muy dolorosa para mí intentar congeniar esas dos emociones dentro de mi cabeza. Quería cantar con toda la afición, con todos mis compañeros, abrazarles, celebrar... y a la vez decir 'estoy totalmente roto por dentro'. Fue algo muy difícil, pero bueno, la vida está para vivir también estas cosas; todos son momentos para aprender y para hacerte más fuerte. Yo, sinceramente, con la temporada que tuve con las lesiones y especialmente el año pasado, me siento con una piel mucho más dura, con un aprendizaje muy grande y ahora mismo deseando tener la oportunidad de sentirme bien físicamente y poder ayudar a mis compañeros, poder sentirme bien dentro del campo y disfrutar del fútbol, que es lo que más quiero"

Pero, dejando a un lado sus problemas físicos, ahora toca un nuevo desafío: "Lo que nos viene es lo que este equipo y este club se merecen. Hemos estado los últimos años a un nivel que ya se ha convertido en la normalidad del Betis, estar en Europa cada año, y volver a estar en la Europa League, aunque nos quedáramos a ese poquito de la Champions League, nos motiva muchísimo. Ese sabor de boca agridulce que nos dejó la temporada pasada es un buen comienzo y unas buenas ascuas de las que hacer fuego otra vez. De verdad que siento que la intención que se huele aquí en el vestuario es ésa y estamos todos muy emocionados; sabemos que ya queda poquito para empezar. El principio de los primeros partidos de LaLiga va a ser muy intenso también y estamos todos ya un poquito deseando, con muchas ganas de vivir al día a día y de seguir construyendo nuestro fondo físico, nuestro ritmo de partido, pero queremos ponernos la camiseta ya en el primer partido y salir a jugar". Sin temor a la competencia, pues, aunque se ha marchado Youssouf Sabaly, ha promocionado Ángel Ortiz y no se descartan movimientos en el mercado por otro lateral derecho (sonó con fuerza Marc Pubill).

"Ésa es una de las características principales que tienen los buenos equipos, una competición sana entre todos los jugadores, que lo único que hace es elevar el nivel entre nosotros de los entrenamientos de competición personal. Aquí hay un vestuario sanísimo en el que no hay ningún tipo de rifirrafe ni nada entre compañeros. Lo que necesitamos siempre es tener un buen fondo de armario, tener las posiciones siempre dobladas e, incluso, triplicadas, porque son muchísimos partidos y los chavales que vienen de la cantera están demostrando un nivel altísimo que siempre es bueno de ver. Yo recuerdo la temporada pasada también en Austria que fue un impacto bueno; la gente que viene de abajo lo hace con ganas y muchísimo nivel; este año estoy viendo algo muy similar y creo que ya se demuestra también con los resultados de la cantera que está teniendo estas últimas temporadas. Estos jugadores, estos chavales, también se merecen la oportunidad de compartir con nosotros lo que es una pretemporada en el primer equipo y tener la oportunidad de demostrar lo que valen ellos y guardarse experiencias súper importantes para ellos en su carrera".

En este sentido, el catalán se deshizo en elogios para Ortiz: "Yo soy un enamorado de Ángel, la verdad; es un jugador que me parece de un talento excepcional. La posición en la que llegó el año pasado de entrenarse poco con el primer equipo, meterte en partidos de la intensidad en los que él entró y cómo se defendió a sí mismo y cómo jugó me pareció digno de un gran profesional. Muy merecida la oportunidad que se le ha dado de estar aquí ahora en el primer equipo. Es un jugador que le va a dar muchísimo al Betis y él sabe que yo le deseo lo mejor; para mí, compartir posición no es ningún tipo de pelea nunca. La comparto con uno de mis mejores amigos como es Aitor Ruibal y siempre estamos intentándonos ayudar el uno al otro; nosotros estamos aquí para eso, para poderle ayudar a él, porque yo tengo ya 30 años y Ángel acabará de cumplir 20; él es el futuro de este club, y tanto a él como a todos los jóvenes que están aquí, nosotros estamos para darles la mano, para ayudarles con todo lo que necesiten, porque para nosotros no hay nada más importante que, en el momento en el que nos vayamos de aquí, saber que lo que viene detrás es, incluso, mejor".

Bellerín se refirió también durante la entrevista al fichaje de Junior Firpo, que considera "muy importante para el club", recorriendo el hispano-dominicano un camino que le suena mucho: "Me ha pasado a mí, le ha pasado a Marc Bartra, le pasa a muchísimos jugadores que juegan aquí en el Betis, por diferentes motivos tienen que irse y es muy interesante; como siempre, el corazón tira para volver, así que me siento muy identificado con cómo se tiene que sentir él. Aquí lo estamos esperando ya con los brazos abiertos; sabemos todo lo que nos puede ofrecer, pues es un jugador que ha tenido la oportunidad de jugar también en la Premier League y estar en el Barcelona, que son oportunidades de aprendizaje siempre muy interesantes y que sólo nos puede aportar a nosotros cosas buenas, así que estamos con muchas ganas de que llegue aquí ya con nosotros". El primer amistoso, en realidad un triangular el sábado contra Farense y Uniao de Leiria, quizás sea demasiado pronto para él: "Para nosotros es uno de los pilares más importantes y tenemos muchas ganas de volver a conectar con la afición, de volver a jugar delante de ellos, de que nos den su calor, de que nos den su cariño y poder devolverles todo ese esfuerzo que siempre hacen por venir a vernos y por querer estar ahí a nuestro lado; y con muchas ganas también de tener ya el balón en los pies y que ruede y que empiece el fútbol".

Por último, fue cuestionado el lateral diestro sobre la experiencia de jugar en el Estadio de La Cartuja, la casa verdiblanca al menos hasta 2027 mientras duran las obras de remodelación del Benito Villamarín: "Hace poco estuvimos algunos de los capitanes viendo cómo habían quedado todas las instalaciones del estadio y fue muy emocionante volver a ese vestuario donde conseguimos la Copa del Rey 21/22, volver a estar en la grada en ese campo que, aunque ahora es totalmente distinto, yo creo que ahí se ha quedado impregnado de esos momentos que vivimos todos ahí. Personalmente, tengo bastante tristeza por el hecho de no jugar en el Villamarín. Para mí es un estadio especial, irremplazable, pero por lo menos nos vamos a un sitio que hemos convertido un poco en nuestra casa, aparte de por lo cerquita que está, por ese momento que vivimos en 2022; esperemos que ese estadio esté lleno de cosas buenas para nosotros. También caben más béticos, que eso es bueno, que yo sé que eso se va a acabar llenando porque tenemos la mejor afición que existe y nada, con mucha ganas de que empiece todo ya".