La emoción de Odriozola tras volver a jugar: "He estado en el infierno"
El lateral diestro, titular por sorpresa ante el FC Barcelona, cuajó un gran partido, con gol incluido, y se emocionó tras el choque al recordar que lo ha pasado "muy mal" en estos últimos meses por no poder ayudar a la Real Sociedad. Incluso, admitió que estuvo cerca de salir en verano.

La Real Sociedad no pudo llevarse ningún punto de Montjuic pese al buen partido firmado por el FC Barcelona. Pero, sin duda, una de las grandes noticias fue ver disfrutar sobre el campo a Álvaro Odriozola, que partió como titular por las molestias de Aramburu en el calentamiento y aprovechó la oportunidad para firmar un gran partido. No solo marcó para adelantar a su equipo tres años después (no lo hacía desde 2022 con la Fiorentina), sino que se mantuvo firme en un complicado duelo con Rashford, siendo sustituido en la segunda mitad fruto del cansancio, que incluso le hizo sufrir calambres.
Fueron 56 minutos que demostraron que el lateral diestro, al que se le buscó una salida en verano tras apenas jugar la pasada campaña, puede ser un elemento muy útil para Sergio Francisco. Pero, sobre todo, sirvieron para que él mismo volviese a sentirse futbolista, como admitió tras el choque con un discurso cargado de emoción.
"Siento mucho orgullo. Vengo de una etapa muy dura. Lo he pasado muy mal porque no he podido ayudar al equipo de mi vida. Soy muy duro conmigo mismo. No he podido defender el escudo todo lo que hubiera querido. No sé la razón. Me he cuidado, pero el cuerpo no me ha respondido, no ha estado con mi cabeza", explicó declaraciones a Movistar+ tras volver a jugar un partido oficial casi ocho meses después.
Reconoce que estuvo a punto de salir
El donostiarra confesó que ha estado "en el infierno" en los últimos meses, pero desveló que hace un mes vivió "un punto de inflexión". "Estuve a punto de salir del club, quería jugar volver a ser yo. He estado en el infierno, con tanta lesión no me salía una. Se sufre mucho. Soy un privilegiado de poder estar en el club de mi vida. Estoy orgulloso de haberlo dado todo y de no haber dejado entrenar", añadió.
El defensor dedicó el gol a su familia, en especial a sus dos hijas, y, visiblemente emocionado confesó que su "sueño" es que ellas le vean "correr en Anoeta". "No sé si voy a volver a jugar, pero el miércoles entrenaré y me dejaré todo cada día en Zubieta para entregar todo por mi escudo", agregó.
Quejas por el arbitraje
Sobre el partido, Odriozola valorado que los jugadores de la Real se sienten "apenados por la derrota, pero orgullosos del trabajo", y opinó que el saque de esquina que posibilitó el gol del empate de Jules Kounde fue "un error manifiesto" del árbitro. Con todo, concluyó que "las sensaciones del equipo son mucho mejores" que en los primeros partidos del curso.