"El Sevilla está obligado a vender"

Tras años de ventas apresuradas y fichajes poco rentables, el Sevilla FC marca un nuevo rumbo con Antonio Cordón al mando. El caso Badé ejemplifica la nueva política: el que lo quiera, tendrá que pagar 30 millones

Chema Cubero
Chema Cubero
Seguir
4 min lecturaSin comentarios

El Sevilla ha cambiado radicalmente desde la salida de Monchi rumbo al Aston Villa. Con el antiguo director deportivo, Víctor Orta, llegaron numerosos jugadores que apenas han aportado al equipo y se vendieron piezas importantes por cifras bajas debido a la falta de paciencia en las negociaciones, un patrón que minó tanto el potencial deportivo como el valor de mercado de la plantilla.

Ahora, con Antonio Cordón al frente, la situación es distinta. Si un club quiere fichar a Loïc Badé, tendrá que poner 30 millones sobre la mesa. Esa es la nueva premisa: no malvender y defender el valor de la plantilla, aunque eso implique negociaciones más largas y complejas.

Hacía años que no se veía esta firmeza en el Sánchez-Pizjuán. Aunque la situación financiera sigue siendo delicada, regalar futbolistas sólo empeora el escenario. Mantener una posición de fuerza busca no solo preservar el nivel deportivo, sino también mejorar la estabilidad económica y reforzar la imagen del club ante el resto del mercado.

Si la venta de Badé se concretara antes del primer partido oficial, el Sevilla podría agilizar las inscripciones de nuevos jugadores. Sin embargo, esta estrategia también conlleva riesgos, como no poder inscribir a determinados futbolistas a tiempo para el debut liguero si las operaciones se alargan demasiado, algo que podría afectar al arranque competitivo.

“Las inscripciones y los fichajes irán llegando”

En la presentación del portero Odisseas Vlachodimos, Cordón fue contundente: "Las inscripciones y los fichajes irán llegando, pero tenemos una fuerza potente, que es el grupo". El director deportivo insistió en que «no donde estábamos, sino dónde queremos estar es lo que me tiene realmente ilusionado».

La directiva, encabezada por Antonio Cordón y José María del Nido Carrasco, sabe que cada venta y cada euro ahorrado serán determinantes para la temporada. La prioridad a medio plazo es reforzar la plantilla una vez que se libere masa salarial.

Por ahora, el principal reto es evitar que la plantilla se debilite demasiado en este tramo inicial. El mensaje es claro: el Sevilla no cederá a presiones externas y mantendrá su política de exigir el precio que considera justo por cada uno de sus jugadores clave, aunque eso suponga llegar al primer partido sin toda la plantilla inscrita y afrontar un inicio más exigente de lo previsto.

En ESTADIO Deportivo debatimos sobre si el Sevilla tiene que vender ya a sus jugadores o aguantar en el mercado hasta que les llegue una oferta satisfactoria para el conjunto de Nervión. Por un lado, Pablo Rivas opina que el Sevilla “debería de vender aunque no sea por las cantidades que pide”. En cambio, Chema Cubero indica que desde la marcha de Orta, al conjunto sevillano se le ha visto con muchas lagunas y ahora tiene que mostrar fortaleza.