El Valencia busca la sorpresa con Mosquera: el plazo marcado

Carlos Corberán ha regresado satisfecho de su viaje a Singapur. A priori, Peter Lim abrirá algo más la mano para cumplir el deseo del técnico de dar un paso al frente y no conformarse con luchar por la permanencia, aunque ni por asomo habrá grandes inversiones. De momento, eso sí, el valenciano ya ha conseguido que se le ofrezcan a Foulquier los dos años de contrato fijos que exigía para renovar. Y ahora no se descarta incluso la continuidad de Cristian Mosquera, aunque su salida parecía cantada hace sólo unos días.

El central hispano-colombiano es una de las grandes bazas del Valencia para hacer caja en el mercado (junto a Javi Guerra). Pero el hecho de que sólo tenga un año más de vinculación por delante (hasta 2026) hace que en Mestalla no tengan la sartén por el mango, viéndose obligados a venderlo por un precio inferior al de su valor de mercado, que asciende a 30 millones de euros según la web especializada Transfermarkt.

De ello se quiere aprovechar el RB Leipzig, dispuesto a poner sobre la mesa algo más de 20 millones. Además, tiene convencido al defensor, por delante de pretendientes como el Villarreal o el Inter de Milán. Pero según Plaza Deportiva, en club che realizará una última intentona para blindar a Mosquera y que siga al menos una campaña más a las órdenes de Corberán.

El 11 de junio arranca el Europeo sub 21 y el central, que no faltará en dicha cita con España, quiere tener arreglado su futuro antes de esa fecha. Por ello, se espera que en los próximos días se celebre una reunión con sus representantes con solo dos soluciones posibles. Si después de meses negociando para que renueve no se logra hacerle cambiar de opinión, se activará su traspaso.

Más allá de querer ser uno de los jugadores mejor pagados de la plantilla, Mosquera siempre ha exigido para seguir que exista un proyecto ambicioso, algo que el Valencia tratará de venderle de la mano de su nuevo CEO de Fútbol, Ron Gourlay. Además, después de estar en la agenda de clubes como el Atlético de Madrid, el Milan, el Aston Villa o el Arsenal, en la capital del Turia no entienden que el futbolista vaya a marcharse a un equipo que esta próxima campaña tampoco jugará en Europa, por lo que se le intentará convencer con esos argumentos.

Las diferencias por la cláusula de rescisión

Otro de los puntos discordantes siempre ha estado en la cuantía de su cláusula. Los agentes de Mosquera exigieron que la misma partiese de una base de 20 millones, mientras que desde el club estaban dispuestos a olvidarse del blindaje de 100 kilos que han impuesto a otros jóvenes valores, pero no a bajar de 30. En ese toma y daca, desde el entorno del zaguero propusieron una cláusula flexible, que aumentaría según el rendimiento del equipo. Sin Europa, se quedaría en 20; pero si se alcanza una competición europea, sería mucho más elevada.