España retrasa el final más doloroso en la Copa Davis

Jaume Munar y Pedro Martínez le han dado la vuelta a un partido loco en Marbella para mantener a España con opciones de estar en la final a 8 de la Copa Davis, algo para lo que aún necesitan dos victorias este domingo

España retrasa el final más doloroso en la Copa Davis
Pedro Martínez y Jaume munar tras ganar a Dinamarca en el dobles de la eliminatoria de Copa Davis 2025 en Marbella - @RFETenis

La selección española se la jugaba a lo grande este domingo en el primer partido de la jornada de la eliminatoria de Copa Davis ante Dinamarca. Después de haber perdido los dos primeros partidos individuales, los de David Ferrer se la jugaban en el dobles para tratar de darle algo de vida a la eliminatoria. Y pese a que se ha rozado la tragedia, Jaume Munar y Pedro Martínez han sido capaces de retrasar el final dramático y como mínimo se va a disputar un duelo más en Puente Romano. Será Pedro Martínez quien trate de dar la sorpresa ante el líder danés, Holger Rune.

Los españoles remontaron un inicio dubitativo para superar con agonía en el dobles a los daneses August Holmgren y Johannes Ingildsen en tres sets, por 1-6, 6-3 y 6-2, colocando así el 2-1 en la eliminatoria, por lo que España sigue con opciones de clasificación para las finales de la Copa Davis 2025. Pasando de los nervios iniciales y de la presión a la máxima confianza, Munar y Martínez salvaron el primer todo o nada de España después de que se sobrepusieran a un mal primer set, que remendaron con una respuesta a la altura de la complicada situación.

La cita empezó torcida y Dinamarca ganó los dos primeros juegos, con Martínez en la red y Munar al fondo de la pista. Ahí ya se escuchó por primera vez el lema del domingo: “¡Sí se puede!”. Había que tener fe en la remontada y, aunque Martínez lideró desde la derecha para romper el saque, Holmgren y Ingildsen fluían más y mejor; les salía todo y sacaban muy bien, a la par que las sensaciones del equipo español eran muy tibias. Tanto que en 26 minutos Holmgren y Ingildsen cerraron un primer capítulo casi perfecto por 1-6. Una duro golpe para España, que obligada al más difícil todavía.

Resurrección

En el segundo parcial ya se veía a una España mejor, con más autoestima y la irrupción de Pedro Martínez, que manejaba mejor las cercanías de la red. Y tras ir manejando sus saques llegó una rotura del servicio cuando Munar aportó con el revés en un momento clave. Para entonces, los fallos de los daneses llegaron en el mejor instante para los de David Ferrer, que de esa ola de confianza ya no iban a bajarse hasta amarrar el 6-3.

En el set del desempate, aguardaba un momento de punto de inflexión, cuando con 1-1 y Dinamarca al saque y 0-40 por delante, Munar sacó su magia y Martínez la consistencia para convertir cinco puntos consecutivos y lograr una rotura de manera magistral. Los juegos posteriores cayeron por su propio peso. El dúo escandinavo se diluyó y España sacó adelante un partido decisivo, evitando una potencial derrota sonrojante que, finalmente, fue alegría y gasolina para seguir creyendo y que ahora necesita ir acompañada de otras dos victorias para lograr estar en Bolonia.