Sinner arrasa a Djokovic y el Six Kings Slam traerá la revancha del US Open

La diferencia entre Jannik Sinner y Carlos Alcaraz con el resto del circuito ATP es ahora mismo algo difícil de clasificar, pues ambos están a años luz del resto de jugadores. En los últimos años han dominado todos y cada uno de los grandes torneos, sin sumar excesivas derrotas y cogiendo el relevo del 'big three', algo que parecía imposible. De hecho, el único que consigue seguirlos, y a cierta distancia, es Novak Djokovic, que pese a sus 38 años mantiene el nivel como el tercero en discordia. No obstante, cuando se mide con alguno de ellos no le da el físico para seguirlos. Un ejemplo claro ha llegado en la segunda semifinal del Six Kings Slam, donde el italiano ha arrasado al balcánico en dos sets.

En los últimos meses no hemos visto al mejor Sinner, pues en el US Open apenas plantó cara a Carlos Alcaraz en la final y aunque ganó el ATP 500 de Pekín, le faltaba ese punto en el que destroza rivales. Por ejemplo en Shanghái, donde tuvo que retirarse por calambres. Sin embargo, ha llegado a Raid, donde el año pasado se embolsó la brutal bolsa del campeón, con ganas de demostrar que está de nuevo al máximo. Ya superó sin problemas a Stefanos Tsitsipas y con Djokovic ha hecho lo mismo.

Su saque, el mejor amigo de Jannik Sinner

Ni en Nueva York ni en los últimos meses Sinner había logrado alcanzar el punto de excelencia que tenía en Wimbledon con el servicio. Pero en Arabia, de nuevo con las pistas bajo techo en las casi siempre ha dominado, lo tiene de nuevo a punto. Contra 'Nole' ha hecho gala de él, al punto de que apenas ha concedido en todo el partido dos bolas de rotura, que ha salvado sin problemas. Eso sí, en el primer parcial ha aprovechado la que ha tenido él para ponerse por delante y manteniendo sus turnos ha puesto el 6 a 3.

Con esa ventaja aún tenía que cerrar el partido. Djokovic ha llegado al torneo saudí con la carga de jugar hasta las semifinales en Shanghái la semana pasada, y se le ha visto cansado, lo que sumado a la potencia de su rival ha sido un gran lastre a la hora de plantar cara. Una vez perdido el segundo set en el segundo le quedaba buscar la épica, pero ha sido imposible. El de San Cándido seguía inconmensurable al servicio, pero además apretaba más al resto, lo que le ha permitido conseguir dos quiebre, hasta cerrar por 6-2 el duelo. Así tendrá la opción este sábado de medirse a Carlos Alcaraz, en una suerte de revancha de lo que pasó en el US Open.