Aitor Torvisco5 min lecturaSe ha hablado y escrito muchísimo en los últimos días sobre el austero y limitadísimo presupuesto del Sevilla FC para afrontar la revolución en su plantilla que prometió abordar en este mercado invernal de fichajes y que, a cuatro días para el cierre, es evidente que no se va a producir. El déficit económico, con dos ejercicios seguidos en pérdidas, y el bloqueo de las cuentas derivado del tenso 'juego de la silla' que mantienen Del Nido y Castro son dos hándicap importantes; pero no los únicos. La idea era darle salida a muchos jugadores y no ha vendido a nadie. Han rescindido dos (Isco y Dolberg), se han marchado cedidos otros dos (José Ángel Carmona y Pedro Ortiz) y más de lo mismo con los que podrían salir en esta recta final, pues Delaney y Januzaj tampoco dejarán ingresos, más allá del importante ahora de sus fichas.
Las lesiones también han tenido mucha influencia en el mercado del Sevilla FC, ya que Delaney seguramente habría salido antes de no dañarse su rodilla en el Mundial y estar casi dos meses de baja; lo mismo que ocurrió con Telles, cerrándole la puerta a Marcos Acuña (de los mejores del equipo en 2023). Quizás el caso más claro de todos es el del Papu Gómez, que acaba de volver a ejercitarse con el grupo y se ha puesto a disposición de Sampaoli después de estar un medio y medio de baja por el fuerte esguince de tobillo que sufrió en los octavos de final de Qatar 2022.
La idea del campeón del mundo y del Sevilla FC era encontrar una salida en enero, pero esta vía está casi agotada. Sobre todo, después de que haya salido un nuevo club descartando públicamente su fichaje, como ya sucediese a principios de diciembre con el AC Monza de Silvio Berlusconi y Adriano Galliani. Fue este último, CEO del club italiano, el que salió ante los medios para hablar de su buena relación con el Papu Gómez pero al mismo tiempo descartar por completo su fichaje en enero.
Después de caerse la opción de volver a la Serie A, donde jugó en Catania y Atalanta, surgió un llamativo interés por parte del Vasco da Gama. El accionista mayoritario del club brasileño es el grupo 777 Partners, socios de José María del Nido Benavente y futuros miembros del consejo de administración del club nervionense, según insiste el expresidente. Desde Suramérica llegaban noticias que apuntaban a que ya había un acuerdo económico con el Papu y sólo faltaba que el Sevilla FC diese el visto bueno a la operación.
Sin embargo, el propio director deportivo de Vasco da Gama, Paulo Bracks, salía este pasado jueves a desmentirlo todo, pese a reconocer que le tantearon el mes pasado. "No hay ninguna negociación con el Papu Gómez, esta información salió hace unos 20 días cuando hicimos un acercamiento. Estos acercamientos son parte del mercado, para entender condiciones y cifras en relación al jugador; pero no hubo propuesta por nuestra parte, ni al Sevilla FC ni al deportista", confesó el dirigente brasileño para ESPN Brasil.
Bracks añadió que, después de interesarse por las condiciones de un posible fichaje del Papu, decidieron no continuar "por circunstancias". "No diré el motivo de por qué no avanzamos. Hay variables que avanzan o no. No llegamos a iniciar una negociación, pero prefiero no explicar los motivos. Admito que antes del Mundial hicimos un sondeo de nombres que podrían unirse a la plantilla, pero ya está", señaló con tono enigmático.
Más allá de esos motivos que Vasco da Gama se reserva para la intimidad, es el segundo club que sale a desmentir un acuerdo con el Papu Gómez tras el AC Monza. El futbolista de 35 años también fue vinculado con el FC Cincinnati de la MLS de Estados Unidos y, en su país, el Club Atlético Independiente también mostró interés tras un homenaje en el que fue elegido ciudadano ilustre de la ciudad de Avellaneda. Igualmente, ninguna de estas opciones cristalizó -el estado de su tobillo y los rumores de operación jugaron en contra- y, salvo sorpresa mayúscula, terminará la temporada como jugador del Sevilla FC.