Bongonda y Duranville, dos oportunidades de mercado diferentes para Antonio Cordón
En busca de extremos interesantes, se pondrán bajo el radar tanto el veterano internacional congoleño con experiencia en España como el joven atacante belga

El Sevilla FC busca extremos en el mercado invernal, tanto por el déficit que dejaron las salidas estivales de Suso Fernández, Dodi Lukébakio y Stanis Idumbo Muzambo (pues sólo llegó de ese perfil Alfon González, ya que Alexis Sánchez no está ya para jugar escorado) como por la posible venta de Rubén Vargas y/o Juanlu Sánchez, dos de los que mayor caché tienen y más plusvalía generarían, con clubes de la Premier League muy pendientes de ellos, también de la Bundesliga en el caso del canterano blanquirrojo. La idea es monetizar alguna salida e invertir lo justo en el rearme de la plantilla, por lo que cualquier oportunidad de mercado es digna de ser estudiada. Aunque tiene muchas 'novias', Antonio Cordón está pendiente del noruego del Manchester City Oscar Bobb, aunque en el horizonte aparecen otras dos diferentes, aunque con el rasgo común de haber nacido ambos en Bélgica.
De un lado, el Spartak de Moscú habría comunicado a Théo Bongonda que puede cambiar de aires en enero sin pagar ninguna penalización con tal de ahorrarse sus altos emolumentos, ya que el ex de RC Celta de Vigo y Cádiz CF apenas ha disputado 91 minutos repartidos en cinco partidos en Rusia, donde pagaron a los amarillos 7,5 millones de euros hace tres veranos por él. A sus 30 años y con contrato hasta el 30 de junio de 2027, sería una interesante incorporación a coste cero, pues ya está demostrando en la Copa de África con la República Democrática del Congo (marcó el gol del triunfo ante Benín y forzó el mal despeje del portero de Senegal para el tanto de Cédric Bakambu este sábado) que sigue a buen nivel.
El otro que se pondrá a tiro es Julien Duranville, a diferencia de Bongonda, un diestro que prefiere percutir desde la izquierda. Canterano del Anderlecht, el Borussia Dortmund pagó 8,5 millones de euros por su pase en el mercado invernal de la 22/23, siendo aún menor de edad, aunque, tras 27 partidos, apenas está teniendo continuidad este curso, jugando la mayoría de minutos con el filial. Todas las partes consideran pertinente una salida para foguearse y revalorizarse, pudiendo ofrecerle un club como el Sevilla FC ese espacio que necesita a sus 19 años. Al menos, para que reconduzca una trayectoria que le llevó a debutar con la selección absoluta de Bélgica en 2024.
Dos buenos negocios de Cordón con el mismo pasaporte
Este verano, el primero de Antonio Cordón como director de fútbol profesional del Sevilla FC, ha estado marcado por tres operaciones de salida tan necesarias como dolorosas, sobre todo en dos de los casos. Con apenas 250.000 euros invertidos en la cesión remunerada al Trabzonspor de Batista Mendy, el nervionense fue el club de Primera división que menos gastó en reforzarse (por delante de Getafe CF y Real Oviedo) y el segundo que mejor balance obtuvo con las ventas (+54,75 millones, sólo peor que los 58,5 de la Real Sociedad). Un esfuerzo obligatorio para reducir la carga salarial tras dos temporadas sin competir en Europa y reducir la deuda. Después del traspaso de Loïc Badé al Bayer Leverkusen (27 millones fijos, cuatro en variables y un 10% de una futura venta), lo más rentable lo proporcionaron dos internacionales belgas (como Julien Duranville) con orígenes congoleños (como Théo Bongonda): el ahora benfiquista Dodi Lukébakio (que llegó del Hertha de Berlín por nueve millones fijos y tres en bonus, marchándose por 20+4 y un 15% de cualquier plusvalía) y Stanis Idumbo Muzambo (de capa caída en el Mónaco, que pagó 10 millones por un extremo reclutado por Víctor Orta por 400.000 euros del filial del Ajax).
