La imagen del entrenamiento del Sevilla: a Lukébakio le cae una 'caparrosina'

Por fin buenas noticias en el Sevilla FC. El equipo nervionense se ha ejercitado en la mañana de este jueves en el Campo A de la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios, en la cuarta sesión para preparar el trascendental partido del próximo domingo ante el CD Leganés. Aunque Caparrós sigue sin disponer de Djibril Sow, que aumenta a cinco la lista de lesionados, por primera vez en la semana ha contado con Isaac Romero -aquejado de gastroenteritis- y además ha celebrado el triunfo de la perseverancia de los servicios jurídicos del club para que Dodi Lukébakio no se pierda esta 'final' por la permanencia en el Ramón Sánchez-Pizjuán. En este sentido, una de las notas más llamativas de la jornada de trabajo en la carretera de Utrera ha sido la charla individual que han mantenido el técnico y el máximo goleador blanquirrojo en esta 24/25.

La cámara de Iván Díaz, compañero de ESTADIO Deportivo, ha sido testigo directo del momento en el que Caparrós tocaba el hombro de Lukébakio y le apartaba del grupo para conversar con él durante unos minutos y en tono claramente distendido, como demuestra la reveladora sonrisa que lucía en el semblante del internacional belga.

Desde su llegada como solución interina tras el despido de García Pimienta, el veterano entrenador viene repitiendo que la clave para revertir la situación de seis jornadas seguidas sin ganar (un punto de 18) pasa por recuperar la confianza de jugadores que son mucho mejor de lo que las circunstancias reflejan y que, para ello, no deja de mantener charlas individuales con casi todos los jugadores. En el entrenamiento de este jueves, con Jesús Navas como espectador de lujo, ha insistido en esta práctica.

Lukébakio, 'pichichi' destacado del Sevilla

Recuperar el gol de Lukébakio es esencial para Caparrós, que ante la falta de efectivos le ha visto siempre como candidato ideal a encajar en su predilecto 1-4-4-2. García Pimienta ya llegó a usar al belga como recurrente '9' en tramos finales de algunos partidos, aunque generalmente partía desde el extremo derecho del ataque sevillista y ahí es donde mejor ha rendido. No obstante es, de lejos, el máximo realizador del Sevilla FC con 11 dianas.

Muy lejos le siguen los cinco del polivalente Juanlu Sánchez; los cuatro del renqueante Isaac Romero, sólo tres de ellos en LaLiga y ninguno en el Sánchez-Pizjuán; los tres del cedido Kelechi Iheanacho, todos ellos ante rivales modestos en Copa del Rey; y los dos de Chidera Ejuke y Rubén Vargas, éste lesionado para lo que resta de temporada como Akor Adams, Lokonga y Nianzou.

Siete jornadas seguidas sin marcar

Sucede que al único que tenía pólvora en este Sevilla FC se le han mojado los barriles justo en el tramo más decisivo de la temporada. Su último gol fue el 1 de marzo, hace dos meses, en la victoria por 0-4 ante el Real Valladolid; cita en la que también tuvo lugar el último tanto de Isaac Romero.

Lukébakio ya encadena siete jornadas seguidas sin ver portería y en toda la segunda vuelta sólo ha aportado tres dianas en 14 encuentros frente a las ocho que hizo en las 19 primeras citas ligueras. En plena ofuscación, encima le cayó la rigurosa expulsión ante Osasuna de la que le han acabado librando los abogados de la entidad. Caparrós, que le daba por perdido, está muy feliz de poder contar con su mejor artillero en una cita tan importante y este jueves ha querido motivarle como sólo él sabe hacer.

Consejo para Lukébakio de un alumno de Caparrós

Precisamente, sobre la 'Dodidependencia' y la alarmante sequía de Lukébakio ha sido preguntado en los medios oficiales Moisés García, el que fuera delantero, entre muchos otros, del primer Sevilla FC de Caparrós (17 goles en 45 partidos) y del CD Leganés (15 en 20 citas): "Yo he tenido también fases en las que me costaba marcar; pero tenía claro que había que entrenar todos los días y mejorar en lo individual los golpeos, los remates...".

"Lo importante es tener un equipo alrededor que confía en ti. Sentirte respaldado por los compañeros, por el entrenador y por la afición. A partir de ahí, todo fluye. Si empiezas a mirar otras cosas, llega la ansiedad y el bloqueo. Yo lo he vivido y es muy desagradable, porque quieres hacer lo posible para ayudar pero, si la mente no está limpia, es difícil que el cuerpo responda", aconsejó.